El Ratón Tintero

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lunes, 2 de junio de 2008

Efímero regalo navideño.



Aquella noche tenía el sueño algo inquieto. Daba vueltas y más vueltas en la cama aunque no llegara a despertarse. Esos días con tanta celebración, tanta comida de empresa, de amigos, de familia... no había estómago que lo resistiera. Con la sed de la resaca, se incorporó para beber agua del vaso que había dejado en la mesilla de noche.

Fue entonces cuando le pareció oír ruidos extraños en el piso de abajo. Encendió la luz y se dio cuenta que ella no estaba acostada junto a él. Rápidamente se levantó, calzó sus zapatillas y con la bata a medio poner bajaba las escaleras, ya completamente despierto por el sobresalto.

Del salón salía luz suave de la pantalla del rincón. Pudo ver en la pared una sombra que se movía, pero ya no se oía ningún ruido. Cogió del paragüero de la entrada un bate de béisbol, que tenía siempre allí más por defensa que por deporte. Lo alzó al aire con ambas manos y se plantó en la puerta del salón sacando valentía del nerviosismo.

¡No podía creer lo que tenía delante de sus ojos! Su mujer arreglada de fiesta, con un vestido plateado y que encima le sonreía con una copa de champan en la mano.

_ Feliz Navidad cariño, ¿una copita para celebrarlo?_ le dijo ofreciendo otra para él.

_ ¿Estás loca? ¿Has visto que hora es? Y ¿se puede saber qué diablos haces así vestida?

_ ¿Te gusta?_ dijo dando una vuelta en redondo_. Es tu regalo de Papa Noel.

_ ¿Cómo que es mi regalo de Papa Noel? Te compras un vestido de fiesta y ¿me lo regalas? No entiendo nada, debo estar aún dormido y esto es un mal sueño.

_ Ven, acércate y toca tu regalo_ dijo ella con una sonrisita sospechosa al tiempo que levantaba los brazos ofreciéndose con picardía.

Soltó el bate con desgana y mucha resignación, se acercó y la tomó por la cintura que ella le brindaba. Pero el sonido crujiente que le llegó de aquel vestido le hizo dar un respingo sin querer.

_ ¡Pero bueno! ¿Qué broma es esta? ¿Qué clase de vestido te has comprado? O más bien tengo que decir: “que me has comprado”.

_ Lo han confeccionado con papel de regalo ¿a que si no lo tocas ni te das cuenta? Está super conseguido.

_ Espera, espera, explícame este juego que a estas horas estoy algo espeso me temo.

_ A ver_ se dispuso ella a explicarle como a un niño pequeño_ ¿no te critico siempre tu forma de abrir los regalos?

_ Sí… ¿y?...

_… siempre con tanto cuidadito, quitando todos los adhesivos, deshaciendo todos los pliegues, doblando luego el papel para reciclarlo en otro reg...

_… que sí, que sí, que cada uno es como es... ¿y?

_ Pues eso, que aquí tienes tu regalo y a ver como lo abres. Anda, lúcete cariño.

Aún tardó unos segundos en reaccionar, pero ya más relajado, la expresión de su cara cambió por completo.

_ ¡Ya!_ Exclamó él con esa sonrisa socarrona que ella conocía y revelaba que entraba en el juego._ Y se puede saber ¿dónde tiene esto los adhesivos para irlos quitando?

_ ¡De eso nada!, ¡Es que ni tiene! ¡Tentaciones las mínimas!

_ ¡Eres de lo que no hay!_ soltó él por la ocurrencia_ Bueno tengo que decir antes de nada, que estas preciosa, hasta con un vestido de papel de regalo plateado.

_ ¡Gracias! Y además es hasta bonito ¿verdad?

_ ¿Dónde lo has conseguido?

_ En Internet. En la red encuentras, lo más peregrino que se te ocurra.

_ Ya lo creo y aquí delante tengo un ejemplo. Bueno y entonces dime ¿cómo lo hago?

_ Pues muy fácil: usando la imaginación.

_ Vale. De acuerdo. Ahora la sorprendida serás tú._ Le contestó con tono entre amenazante y divertido.

Se despojó de la bata que ya le estorbaba y volvió a cogerla por la cintura haciendo crujir el papel de nuevo, esta vez sin sobresalto alguno.

_ ¿No te hace daño este papel en tu piel tan delicada?_ le susurró al oído

_ No mucho_ le dijo ella también medio susurrando_. Además, ayuda la recompensa que me espera ¿no?

_ Palparé un poco a ver que encierra mi regalo, porque ¿zamarrearlo no puedo no?

_ ¡No! ¡Serás bruto!

_ Bien… a ver entonces que tenemos por aquí_ dijo subiendo las manos por la espalda de ella_. De momento parece que no llevas sujetador.

_ No, no era necesario, pero baja las manos, sigue adivinando.

Bajó las manos palpando las nalgas de ella y preguntó...

_ ¿Tampoco llevas braguitas?

_ Tanga, llevo tanga.

_ ¡Bien! ¿También de papel?

_ ¡Claro!

_ ¡Me gusta! A ver que nos encontramos por delante.

Tocó con ambas manos los pechos por encima del vestido, cogiendo el papel la forma de ellos. A ella no se le caía la sonrisa de los labios, le gustaba esa sensación y sus pezones lo decían por ella; él, los escuchó perfectamente. Los acarició arrugando el papel en dos puntas que se fueron rompiendo poco a poco, hasta aparecer los pezones duros y calientes pidiendo guerra. Los saludó como es debido, se agachó y los succionó como un niño pequeño para luego rodearlos varias veces con la lengua húmeda, lo que hizo que el papel se mojara y rompiera aún más.

Ella se dejaba llevar, se le cerraban los ojos sin querer, pero no quería perderse ese espectáculo tan particular.

_ ¿Te puedo quitar el lazo que llevas en el pelo?_ le preguntó él.

Tenía un trocito de papel mojado en los labios, ella se lo quitó con un beso también húmedo de pasión. No hacía falta decir más, ya estaba entregada por completo. Le quitó el lazo de la cabeza y se lo ató a la cintura. Ese vestido tan fugaz tenía que soportar todas las embestidas que le esperaban. Se puso de rodillas delante de ella y cogiendo el dobladillo con ambas manos a la altura del pie derecho, empezó a rasgarlo hasta dejar toda la pierna al aire. Sacó el muslo de su escondite y paseó la yema de sus dedos por la parte interna, de abajo a arriba. Lo mismo hizo con la otra pierna, una gran raja a todo lo largo de la falda, dejándola dispuesta a sus caricias.

_ Mumm vas muy bien cariño, sigue así_ musitó ella aprobando el examen.

_ ¿No te da pena lo que estoy haciendo con tu vestido nuevo?

_ ¡Para nada! Además, recuerda que no es mío, es todo tuyo, es tu regalo de navidad; de un sólo uso y tú, lo estás estrenando de maravilla_ volvió ella a certificar.

_ Date la vuelta a ver que tenemos por aquí detrás_ pidió él con la seguridad del que sabe que lo está haciendo bien.

Abarcó el trasero de ella con ambas manos. Lo acarició y acarició amasando el papel hasta que tomó la forma de ese culito que a él volvía como loco y más disfrazado de esa forma. Pasó los pulgares una y otra vez por la raja hasta que el papel cedió, dejando al aire la unión de esas dos montañas erizadas de placer, con la cuerdecita de papel del tanga que lo vestía. Hundió su perfil en el surco abierto y lamió con avaricia al tiempo que apretaba los glúteos con las manos abiertas. Pero no quería romper la fina cuerda del tanga con la humedad de su saliva y desistió seguir de momento.

Volvió a las rajas abiertas delante y cogiendo el tablón de papel que había resultado antes, fue doblando y doblando hacia arriba desde el filo de abajo sin dejar de mirarla a los ojos. La lujuria estaba reflejada en ellos y eso lo excitaba, animándolo a seguir.

Al final, lo arrugó y remetió en el improvisado cinturón de la cinta atada a la cintura. Pero ahora le esperaba una nueva sorpresa. El papel del tanga era transparente dejando ver un pubis totalmente depilado. Eso le ayudaría en su objetivo. Con mucho cuidado y la punta de los dedos, fue recortando un círculo a la altura del punto que la hacía gritar de placer a ella y otro más abajo a la altura de la cueva que le gustaba habitar a él.

Ya le fallaban las piernas, lo que él aprovechó para tumbarla en la alfombra y terminar de destrozar el tanga a fuerza de lengua y saliva.

Todo se precipitó de repente. Ella pedía relleno y él tampoco podía esperar más. Sacó su también juguete erecto por la abertura del pijama y allí mismo terminaron de disfrutar los regalos de navidad.

Ya exhaustos, tumbados uno al lado del otro en la alfombra mirando al techo, todavía atinó ella a recriminarle:

_ No te has quitado ni el pijama, ¡canalla!

A lo que él se defendió medio asfixiado aún:

_ ¿Desde cuando se desnuda uno para abrir un regalo?


2 comentarios:

ErCalamar dijo...

JAJAJAJAJAJA el final es genial, el principio y tronco son buenisimos, he disfrutado de lo lindo.

Chary Serrano dijo...

Esto si que es erotismo fino.

y da ideas.....

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